Economía de las firmas de abogados en 2020
Recientemente, el Banco de la Reserva Federal de Atlanta estimó que el impacto de la pandemia de Covid-19 hará que el PIB de EE. UU. Se contraiga un 52,8% durante el segundo trimestre de 2020. Los bufetes de abogados no han sido inmunes a la fuerte caída de la actividad económica, que está disminuyendo la recursos disponibles de los clientes para pagar los honorarios legales. A pesar de los programas de estímulo masivo del gobierno de los Estados Unidos para las grandes y pequeñas empresas, se están produciendo despidos y reducciones salariales. Teniendo en cuenta la estimación del Banco de la Reserva Federal de Atlanta, ¿cómo será la economía de los bufetes de abogados durante el resto de 2020?
Si bien algunos grupos de práctica, como la quiebra y quizás los litigios, pueden ver un aumento en la actividad debido a esta interrupción económica, parece que la mayoría de las áreas de práctica continuarán experimentando una fuerte disminución del trabajo disponible en comparación con 2019. La interrupción económica de Covid -19 tiene paralelismos con lo que experimentaron los bufetes de abogados durante la gran recesión que comenzó a fines de 2008. Sin embargo, informes recientes de datos de empleo del gobierno sugieren que el estímulo económico del gobierno de EE. UU. Puede servir para mitigar la duración de esta crisis y permitir una recuperación económica más rápida en general, y para bufetes de abogados.
Dicho esto, si una segunda ola de Covid-19 impactara a los Estados Unidos en el otoño o antes, su impacto económico podría extenderse hasta el tercer trimestre de 2020 y más allá. Debido a que un gran porcentaje de los gastos operativos mensuales de los bufetes de abogados están vinculados a costos fijos como el alquiler y los costos de nómina, una mayor contracción económica podría acelerar los despidos y, en algunos casos, provocar la fusión y disolución de los bufetes de abogados.
2020 podría terminar siendo uno de los peores años financieros para los bufetes de abogados en más de una década, y los bufetes deberían tomar las medidas necesarias para posicionarse en áreas de práctica que puedan preservar su viabilidad.